La niñez nicaraguense es la más feliz del planeta. No es necesario poseer los grandes recursos económicos para conocer algún cuerpo de agua creado por nuestra madre naturaleza. Definitivamente Dios bendijo a nuestra tierra... Recuerdo los bellos e inolvidables paseos a las bravas aguas de Pochomil, Poneloya y las tranquilas de El Velero en el pacífico de Nicaragua.
Sin duda el mejor país del mundo para vivir y gozar de la tranquilidad, la hospitalidad y la amistad de un pueblo al que le ha costado sudor y sangre mantener su espirítu a flote. Pero, lamentablemente siempre existen fuerzas oscuras y envidiosas que intentan desaparecer todo lo bueno y que sin medir las consecuencias de sus actos, son capaces de pasar por alto la voluntad misma del "supremo" y los clamores de dos pueblos (Nicaragua y Costa Rica).
El gobierno de la hermana república no cesa en dejar mal parado a nuestro país y en un intento "frustrado" de aprovechar a nuestro Río San Juan de Nicaragua, destruye su propio territorio en aras según ellos del desarrollo.
Todos sabemos que ningun desarrollo puede venir soportado por la destrucción de la naturaleza.
¿Otra vez San Juan de Nicaragua?
Otra vez clama la fortaleza... otra vez se levanta Rafaela Herrera para defender lo que un día será el patrimonio de nuestros hijos e hijas, un patrimonio de los centroamericanos, de los latinoamericanos y del mundo.
Son infinitos los alegatos de Nicaragua para la defensa y reafirmación del sumo imperio del pais sobre las aguas de tan precioso río.
En este link pueden descargar el Libro Blanco (Verdades que Costa Rica oculta). Despues, estoy más que seguro que el mundo conocerá sonbre la nueva cara de la "Suiza centroamericana" -recordemos que Europa está en crisis- una cara verde incipiente retocada por los medios de comunicación del norte y de ellos mismos.
Que triste como nuestros vecinos no pueden hacer a un lado las diferencias y actuar con un poco más de amor hacia la Patria Centroamericana.
ResponderEliminarEs hora de que nos respeten, que respeten las decisiones tomadas y ratificadas por la Haya, no solo se trata de "molestar" o dañar a Nicaragua sino que sus actos van en perjuicio de la humanidad entera, esperemos no sea tarde ya cuando los hermanos Costarricenses recapaciten sobre sus acciones.
El Río San Juan es de Nicaragua y del mundo.
No olvidemos que el mundo es nuestra casa..
gracias por comentar Andrea.
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